El crimen de Seseña (Toledo) descubierto el pasado sábado por la noche fue un asesinato machista, según ha confirmado la Guardia Civil. El agente del Instituto Armado hallado muerto junto a su pareja acabó con la mujer a tiros con su pistola reglamentaria y luego se suicidó con la misma arma, a tenor del informe de los investigadores.
Fue una hermana de la fallecida la que acudió a la vivienda el pasado sábado por la noche después de que ésta no contestase a sus llamadas en los dos últimos días. Tenía llave de la casa y, al entrar, se encontró con los cadáveres de Laura, de 26 años, y de su novio José Ricardo, de 31 años y destinado a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
La hermana avisó de inmediato a los servicios de emergencia y a la Policía. Los investigadores determinaron que el hombre acabó con la vida de Laura de dos o tres disparos y que luego se quitó la vida en el salón de la casa.
En los archivos no consta ninguna denuncia por maltrato de la mujer hacia su pareja. Con todo, la fallecida sí había comentado a sus íntimos que la relación no iba por «buen camino». Señaló a una amiga que «lo estaba pasando mal, ya que estaba con una persona que le trataba mal».
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